Parte 2

Como dos extraños viajando, solo el ruido del camión y sus llantas al avanzar nos acompañan entre los asientos que ocupamos al rodar, abres la puerta donde con la fricción de nuestros encuentros creábamos música al rosar nuestros cuerpos de par a par, te miro y me miras, te abrazo y me abrazas, siento tu corazón alado mío por ultima vez, unas tijeras en el aire nos separan, camino expulsando el mar dentro mio, que ahogándome se encontraba y viajo sin rumbo fijo, pidiendo al tiempo que avance a prisa para saber en que momento volverán a encontrarse nuestras sonrisas.

Comentarios