Esencial

Ojalá se nos concediera tener alas y elevarnos por el aire, y allí, en medio del Cielo y de la Tierra, todos y cada uno de nosotros pudiéramos ver el corazón de nuestro mundo, junto al fluir de las olas del mar, las corrientes de los ríos, el libre flotar del aire, la agudeza del fuego, la rapidez del Cielo, la gloria infinita de la naturaleza. Imaginen poder contemplar de una sola vez todas estas maravillas, todos veríamos con otros ojos las cosas y nuestras acciones serían distintas hacia nuestro entorno.

Pero antes para poder hacer esto, es necesario que desgarremos las ataduras que cargamos en la espalda, el velo de la ignorancia, el recelo a el que tiene, el que tiene la dicha de hacer esto y lo otro. Debemos eliminar cada una de las cosas que no nos sirven y luchar para recuperar el sentido de la observación, tan despreciado, que hemos ido cegando por solo creer importante lo material, nos opaca el sentir y el apreciar y hunde nuestro espíritu cada vez más, para que no escuchemos lo que en verdad debemos oír y no miremos las cosas que debemos ver.
-Random Rojo