Ahí en la orilla.

Aquí en la orilla estoy esperando aquel navío en el que espero zarpar, donde la muerte no existe pues nunca hay un final, en la orilla esperando zarpar con ansias y prisas, el viento y la brisa deseo saborear, esperando la noche que a las aguas nos llevara a escuchar a las sirenas en nuestros oídos susurrar, pues en este lugar tus deseos se harán realidad, cuando llega la noche la luna es nuestra cómplice pues menguando ella nos arrullará, cuando llegue el día, tus sueños hechos realidad estarán.

Buscando un tesoro que en nuestra alma podamos saborear, no escondido ni de oro o plata que quiero sacar, les estoy hablando del tesoro más preciado que solo en el mar mirando hacia el cielo podrás encontrar, aquel brillo en el manto estelar.

Junto a la brisa deseo cantar toda la noche tras una fogata apreciar, mirando las estrellas que mi camino iluminaran pues sé que mi alma siempre estará en paz, pues en aquel navío mis amigos conmigo siempre estarán.

En mi alma tatuados con su olor y amistad estarán, e impregnados en mi espíritu quedaran, pues aquí en la orilla solo espero al navío zarpar, tocando una guitarra y con una flauta acompañar maravillosas canciones que yo y el mar podremos contemplar.

La luna, la brisa y el mar, esta noche mis cómplices serán, de que solo estoy diciendo la verdad, ya no soy más esclavo del tiempo ni de nadie más, pues el día de hoy he decidido y llevado a cabo mi libertad y así será pues aquí en la orilla esperando estoy aquel navío que me hará zarpar.